La conservación del agua no es solamente una preocupación medioambiental mundial cada vez mayor; el agua también se está volviendo un recurso cada vez más costoso. Nuestro homogeneizador cuenta con un sistema de enfriamiento en serie y con una barrera aséptica de condensado de alta temperatura que preservan la inocuidad alimentaria. La combinación de ambas características permite reducir el consumo de vapor en un 70 % y el consumo de agua de enfriamiento en un 80 %, comparado con las soluciones convencionales. Para comprender cómo logramos este avance, es útil conocer cómo funcionan los sistemas de enfriamiento en serie y por qué el condensado a alta temperatura requiere un menor consumo de vapor y agua.
El sistema de agua de enfriamiento en serie que se encuentra dentro de nuestros homogeneizadores es una característica fundamental que permite el ahorro de agua. Ahorra vapor y, al mismo tiempo, protege la inocuidad alimentaria, ya que utilizamos una solución de condensado de alta temperatura. En los homogeneizadores asépticos, el enfriamiento en paralelo del pistón consume más vapor que los sistemas de enfriamiento en serie. Además, hasta un 80 % del agua de enfriamiento se puede volver a poner en circulación y volver a utilizar.
Independientemente del tipo de homogeneizador que se emplee, el vapor que suministra la planta siempre debe estar a la misma temperatura, cuando ingresa al homogeneizador. En las máquinas convencionales, que usan condensado de barrera frío, es necesario enfriar el condensado antes de que este ingrese al cartucho del pistón. La mayor parte del consumo de agua en estas máquinas se debe a este proceso de enfriamiento necesario para reducir la temperatura del condensado. Primero, el condensado se enfría desde su temperatura inicial a 100 °C. Luego, el proceso de inversión de fase convierte el vapor en agua y, por último, el agua se enfría a 60 C. El proceso de inversión de fase, en el que se convierte el vapor en agua, requiere, en particular, enormes cantidades de agua de enfriamiento, hasta 5 000 litros por hora o más, en las máquinas de alta capacidad.
Sin embargo, en nuestro homogeneizador no es necesario enfriar el condensado, ya que toda la máquina está diseñada para funcionar a altas temperaturas. En consecuencia, nuestras máquinas no requieren el paso de inversión de fase y utilizan únicamente el vapor y el agua necesarios para generar el condensado.
El homogeneizador cuentas además con otras características que también contribuyen a reducir el consumo de infraestructura; por ejemplo, una válvula de inversión automática que reduce el vapor durante la limpieza en el sitio (CIP) y el equipo de control de la máquina, que limita el uso de agua de enfriamiento.
En conjunto, esto significa que nuestra solución de homogeneización genera ahorros en los servicios públicos equivalentes al 70 % en vapor y del 80 % en agua, comparada con los diseños convencionales. A estos ahorros, se le suma una reducción significativa de los costos operativos y del impacto medioambiental, todo lo cual contribuye a lograr el costo total de propiedad más bajo de la industria.