12 de noviembre de 2021
Los consumidores actuales buscan alimentarse y vivir de forma más saludable, pero al mismo tiempo, llevan vidas ocupadas y eligen opciones de alimentos convenientes. Esto quiere decir, demandan envases para consumir sobre la marcha, que mantengan los alimentos nutritivos, pero sin dejar de lado la sostenibilidad. El envasado de alimentos contribuye de manera negativa a los desafíos climáticos, y los consumidores desean formar parte del cambio. En una encuesta que se llevó a cabo por Boston Consulting Group se muestra que el 74 % de los consumidores pagarían más por un envase sostenible.
Entonces, ¿cómo mejoramos el envasado de alimentos aún más? Como menciona Laura Latišonoka, directora de Soluciones de alimentos de Tetra Pak: "Debemos repensarlo de abajo hacia arriba. En la actualidad, los envases incluyen plástico debido a sus cualidades protectoras, pero el plástico se basa en gran medida en el petróleo, que representa un tercio de las emisiones de carbono en el mundo".
Sin embargo, no podemos simplemente eliminar el plástico, a medida que los desafíos como la pandemia de COVID-19 ha enfatizado la necesidad de salud y seguridad. El envasado desempeña un papel importante en garantizar esto, por lo que estamos en la búsqueda de alternativas viables; una búsqueda en la que observamos las últimas tendencias, así como lo que podría deparar el futuro para el envasado de alimentos.
A medida que la industria se vuelve cada vez más digitalizada, nuevas innovaciones hacen posible que existan opciones sostenibles para los consumidores y productores. El futuro apunta hacia el envasado inteligente, como los envases inteligentes y activos, que pueden cumplir otras funciones además de almacenar un producto, lo que aumenta el compromiso del consumidor y mejora la seguridad del producto y la trazabilidad. El envasado inteligente utiliza varias tecnologías para comunicar, informar e involucrar, y también se puede utilizar para hacer un seguimiento de la producción y los suministros a la vez que se crean experiencias únicas y oportunidades de marca.
Esto es algo que ya hemos lanzado en Tetra Pak. Nuestra versión del envasado inteligente, los envases conectados, les permiten a los productores convertir sus productos en portadores de datos, con un código QR único en cada envase. La impresión digital también es un campo interesante, con tecnología que ofrece niveles nuevos de personalización.
"La impresión digital puede reducir la complejidad de la producción y ahora ofrecemos impresión digital a todo color en nuestros envases de cartón. Esto quiere decir que podemos reducir los tiempos entre el diseño y la impresión y hacer que la confirmación del pedido y la personalización de los productos sean más flexibles", explica Laura.
Sin embargo, eso no es todo. Podríamos avanzar hacia un cambio completo del envasado; por ejemplo, los envases comestibles, que eliminan la necesidad de reciclaje. Ya existen ejemplos, como el cono de helado y las tazas de café elaboradas de chocolate, pero aún falta mucho por hacer.
"No creo que hayamos visto un avance verdadero aquí todavía. El envasado comestible es un área compleja con un potencial de problemas de higiene. Tampoco es la respuesta a todos los desafíos", dice Laura, y señala el alimento para llevar (una opción cada vez más popular hoy en día), o el hecho de que los alimentos se deban transportar de forma segura.
"El envasado inteligente les permite a los productores trabajar de manera más eficiente y ayuda a mejorar toda la cadena de valor, desde la supervisión hasta la recopilación de datos, que aumenta el conocimiento del consumidor y reduce los desechos", comenta Laura.
El envasado inteligente también brinda facilidad de uso para los consumidores, con información sobre los ingredientes, recetas e inspiración para el consumo, disponible a través de un dispositivo inteligente. Se puede usar para supervisar la condición de un producto y para diagnosticar, indicar y brindar información acerca de la frescura del producto. Los cambios en el color pueden alertar a los consumidores sobre una perforación en el envase o si hay evidencia de contaminación, y los indicadores de fecha y temperatura (TTI) pueden indicar si los alimentos que se estropean a ciertas temperaturas se han expuesto a dichas temperaturas.
En cambio, el envasado activo interactúa directamente con el contenido de un envase. Puede ayudar a mejorar la vida útil al liberar o eliminar ciertas sustancias a través de filtros, absorbentes de oxígeno, materiales reguladores de la humedad o recubrimientos antimicrobiales. Además, es posible incluir componentes activos en el envase, como es el caso de algunas cervezas en botellas plásticas, que contienen absorbentes de oxígeno en la tapa para extender la vida útil de tres a seis meses.
"Estamos atravesando tiempos increíbles con respecto al envasado, y en la próxima década seguro se presentan nuevas innovaciones dentro del campo. En Tetra Pak, trabajamos siempre para aumentar la inocuidad alimentaria y la disponibilidad de los alimentos. Visualizamos un futuro en el que los envases inteligentes interactúan con electrodomésticos inteligentes, como el refrigerador, para brindarle actualizaciones del contenido y sugerencias sobre qué cocinar según sus recetas favoritas", comenta Laura.
Laura concluye: "Cuando se trata de envasado, centramos toda nuestra atención en la creación del envase de alimentos más sostenible del mundo. Para garantizar la inocuidad alimentaria en todo el mundo, el envasado aséptico es una obligación, y nos enorgullece seguir innovando con otras personas y llevar el envasado de alimentos al siguiente nivel".