2018-02-19
LUND, SUECIA

Los servicios de automatización ayudan al productor de puré de frutas a garantizar el cumplimiento de las normas de la FDA

El cliente, un productor de puré de frutas de América, se enfrentó al desafío de cumplir con las normas de la Administración de Alimentos y Medicamentos (Food and Drug Administration, FDA). En particular, el requisito consistía en que la planta debía tener una exposición exacta de un químico sanitario después de cada limpieza en el sitio (Cleaning-in-Place, CIP). El diseño del sistema de control y del proceso del cliente no permitía una dosificación exacta y consistente, y no todas las partes de la planta estaban expuestas. El requisito se debía abordar de manera rápida o, de lo contrario, la FDA cerraría la fábrica por incumplimiento.

Un esfuerzo conjunto de nuestros equipos de servicios de automatización

Movilizamos de manera rápida un equipo multidisciplinario de expertos en inocuidad alimentaria, que incluye ingenieros de puesta en servicio y de automatización, desde nuestros centros de servicios de automatización en Europa y los EE. UU. El objetivo consistía en lograr el cumplimiento total de las normas antes de la próxima visita de la FDA, que estaba programada para llevarse a cabo en menos de cinco semanas a partir del inicio del proyecto, en la planta del cliente. Los componentes clave para alcanzar el éxito fueron la capacidad del equipo para comprender de manera rápida las necesidades del cliente, para trabajar en estrecha cooperación con el cliente y para encontrar una solución que fuera trazable. 

Modificamos todos los circuitos de limpieza para exponer de manera correcta el desinfectante a cada componente del equipo y actualizamos el conjunto de CIP con códigos y cálculos personalizados para lograr una dosificación uniforme. 

La solución se distribuyó en toda la fábrica: 2 estaciones CIP y 8 plataformas por lotes en total. Después de finalizar el proyecto en la primera planta, aprovechamos al máximo nuestra experiencia para implementar esta solución en una situación similar en la otra planta del cliente.

Completamos la tarea tres semanas antes de la fecha límite

La tarea se completó en solo dos semanas; es decir, tres semanas antes de lo programado. El tiempo de inactividad total fue de cero: no hubo interrupciones en la producción, ya que el trabajo se realizó durante las noches y los fines de semana. A pesar del calendario ajustado, el cliente siempre estuvo actualizado sobre el progreso del proyecto. La planta aprobó la inspección de la FDA y no se cerró. El cliente manifestó una gran satisfacción, lo cual también se transmitió a la organización.