El envasado y especificamente la reciclabilidad son fundamentales para el debate medioambiental. El reciclaje se considera ahora el principal rasgo característico (con un 63 %) de una persona ecológica, y el 39 % de los consumidores dicen tener interés en leer y aprender más al respecto.
La reciclabilidad es también la primera asociación que se hace con productos ecológicos (con un 19 %), aunque ahora comparte el primer lugar con la biodegradabilidad, que ha aumentado un 5 % desde 2017. Y la reciclabilidad es el tercer descriptor más atractivo de los envases de alimentos o bebidas en general (con un 34 %), después de "con ingredientes naturales" y "sin aditivos".
Sin embargo, hoy existen problemas importantes relacionados con el reciclaje; por ejemplo, se citan como obstáculos la falta de disponibilidad (24 %) y la dificultad (21 %). Quizá lo más preocupante es el escepticismo sobre si el reciclaje realmente funciona: un 30 % de los encuestados dice ver desechos mezclados en contenedores de clasificación, por ejemplo.
En las entrevistas a los consumidores, prevalece la idea de que los esfuerzos para mejorar la propia salud son más fáciles, eficaces y tangibles que tratar de mejorar individualmente el estado actual del planeta, lo que tal vez no resulte sorprendente.
En el Reino Unido y EE. UU., los consumidores con conciencia ecológica tienden a elegir envases reciclables, si hay opciones disponibles. Pero muchos se dan cuenta ahora de que algunos artículos de plástico no pueden reciclarse, y algunos intentan encontrar sus propias formas de reutilizarlos. Otros se sienten obligados a tirar cosas a la basura como única alternativa, y esto los suele hacer sentir culpables.
En los países en desarrollo o recientemente desarrollados, no hay confianza en que los esfuerzos individuales hacia la sostenibilidad aporten algo realmente a la situación general. Esto resulta especialmente alarmante, ya que también se desconfía de las grandes empresas, sobre las que existe la percepción de que se benefician de las desgracias de las personas.
Mientras tanto, el plástico, en concreto su impacto sobre los océanos, recibe hoy en día mucha atención negativa, impulsada por imágenes de fauna marina que han dado la vuelta al mundo. La legislación antiplástico está creciendo: por ejemplo, 127 países imponían restricciones sobre las bolsas de plástico el año pasado, según la ONU, mientras que hay nuevas normas de la UE dirigidas a productos de plástico de un solo uso (y artes de pesca), que representan el 70 % de la basura marina.
El sentimiento antiplástico aparece con fuerza en nuestro estudio de investigación global. Evitar el plástico es ahora el segundo rasgo característico de las personas con conciencia ecológica (con un 58 %), y un tercio de todos los consumidores dice tener previsto comprar y usar menos plástico en los próximos 12 meses. Es la tercera ambición de cambio por detrás de los habituales favoritos de "hacer más ejercicio" y "comer de forma más saludable". La compra de productos sin envasar o con un envasado mínimo también puntúa en lo más alto entre los rasgos medioambientales, con un 47 %.
Inaugurado en 2018, el Waldorf Astoria Bangkok es el primer hotel Waldorf Astoria del sudeste asiático; ocupa los tres pisos superiores de un emblemático edificio de 60 pisos en un distrito comercial de alta gama.
Como parte de su compromiso continuo por minimizar los plásticos de un solo uso en su propiedad, el hotel ofrece a los huéspedes en sus habitaciones agua en envases Tetra Prisma® Aseptic de 500 ml de la marca Waldorf Astoria, en lugar de en las botellas de plástico habituales, junto con sorbetes hechos de farfolla de maíz.
El hotel también informa a los huéspedes sobre cómo se reciclan dichos envases para bebida a través del Proyecto Green Roof, que convierte los envases usados en láminas de techo para proporcionar refugio de emergencia a las personas necesitadas después de desastres naturales.
JUST Goods, Inc. es una empresa de productos envasados que pone la sostenibilidad en primera línea de su modelo de negocio. Su producto principal es JUST Water: agua de manantial 100 % de origen responsable en un envase a base de plantas.
En EE. UU., el agua proviene de Glens Falls, Nueva York, de una cuenca con un total de más de once mil millones de litros y que se repone constantemente con lluvia y nieve. La comunidad usa tan solo alrededor de la mitad del agua disponible y JUST embotella parte del excedente. JUST también tasa el agua de manera justa: paga seis veces la tarifa municipal sobre el agua, lo que contribuye al crecimiento económico de la comunidad de Glens Falls y a las mejoras en la infraestructura local del agua.
JUST Water se envasa en envases Tetra Top® de 330 ml y 500 ml: el 54 % del envase es cartón fabricado a partir de árboles con certificación FSC™, y el 28 % es plástico derivado de la caña de azúcar, lo que hace un total del 82 % de materiales renovables. Los materiales para envasado se envían en rollos planos, los envases se pueden rellenar, todos ellos son factores que llevan a una reducción del 74 % en las emisiones dañinas de CO2 en comparación con botellas de plástico de tamaño similar.
Más información sobre agua en botellas de cartón Tetra Top®