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14 de noviembre de 2022
Es una idea común en la industria de los alimentos y las bebidas (y de la fabricación en general) que la automatización requiere cantidades enormes de datos. A mayor automatización, mayor necesidad de datos; y deben ser datos de alta calidad. Sin embargo, ¿cómo se define la alta calidad? ¿Cómo se hace para reconocerla? ¿Y cómo sacar el mayor provecho a los datos de los que se dispone?
Cuando hablamos de datos de alta calidad, no se limitan a aquellos basados en equipos y sistemas digitales: también incluyen datos no digitales, es decir, datos que se encuentran en los procesos manuales y las mentes de los empleados. Estos datos son tan fundamentales para permitir una toma de decisiones más informada, desde la planta de la fábrica hasta la sala de directorio, como para generar resultados para los clientes y la empresa.
En nuestro informe técnico, Cómo desbloquear la fábrica oculta a travésde una toma de decisiones informada, Dean Griffin, gerente sénior de soluciones de servicio en Servicios Tetra Pak AB explica: "Necesitamos datos para tomar decisiones informadas, pero los datos pueden ser digitales o no digitales. Los datos digitales son lo que todos tenemos en nuestras empresas; pueden estar en la computadora o en papel. Los datos no digitales se definen mejor como datos subconscientes. El conocimiento y la experiencia son ejemplos de datos subconscientes, y la capacidad de racionalizar forma parte de los datos no digitales".
De ese modo, los datos de alta calidad se pueden definir como datos que se recopilan constantemente de fuentes digitales, bien visualizados para permitir un análisis rápido y combinados con la experiencia y el conocimiento de los empleados. Con este tipo de datos de alta calidad, una organización puede tomar decisiones informadas y mejores en repetidas oportunidades.
Pero, ¿quién toma las decisiones? Esta es una pregunta con la que muchas organizaciones enfrentan dificultades. En nuestra experiencia, es importante impulsar a las personas en todos los niveles de la empresa para tomar decisiones basadas en datos. Esto requiere que todos tengan acceso a los datos, y que las metas de la empresa se comuniquen de manera clara y se comprendan, para garantizar que se tengan en cuenta al momento de tomar decisiones.
Es común ver que muchas empresas tienen datos incompletos, y que distintas personas se basan en distintos conjuntos de datos para tomar decisiones efectivas. Sin embargo, cuando todos tienen la información que necesitan para tomar decisiones significativas dentro de su área, dependen en menor medida de las decisiones de otras funciones, y todos pueden contribuir a obtener mejores resultados comerciales.
Por ejemplo, cuando el personal operativo está capacitado para tomar decisiones sobre los productos, la gerencia media queda liberada para enfocarse en desafíos comerciales tácticos, con toda la experiencia y los conjuntos de información disponibles. La gerencia sénior puede respaldar a la gerencia media al proporcionar una dirección estratégica y aclarar los objetivos. Estos se impulsan a través conjuntos de información operativa y no operativa.
"Al entender mejor la interfaz humana, podemos presentar datos e información de una forma más fácil de entender y facilitar la toma de decisiones más informada con conjuntos de datos incompletos", afirma Griffin.
Pablo Picasso dijo una vez: “La acción es la clave fundamental del éxito”. Y otorgar la capacidad a todos para que tomen decisiones conduce a la acción. La idea común es correcta: se necesitan datos de alta calidad para optimizar un negocio. Pero al evaluar la calidad de los datos, no hay que olvidar tener en cuenta todas las fuentes, digitales y no digitales, de las que se dispone. Hay que recolectarlos sistemáticamente, visualizarlos con eficacia y ponerlos a disposición de manera centralizada, para capacitar a las personas de todos los niveles para tomar decisiones que generen resultados.
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